En este ambiente sin tener premios como referencia aún, destamos lo que nos pareció más interesante de este segundo semestre del 2024. ¿Las viste?
Monkey Man
En un exquisito debut directoral de Dev Patel, Monkey Man llenó la cuota de acción del 2024. Un film de venganza con muchas similitudes a John Wick, pero que las abraza haciéndose cargo de la referencia al mismo tiempo que propone algo nuevo. Fue esa mezcla entre drama con crítica social y las cuotas de acción necesarias para mantenerte expectante en el asiento lo que lo hace una experiencia memorable. Destacan tomas de cámara antes no vistas en coreografías de peleas hasta una cinematografía bellísima. Qué maravilla ver propuestas frescas de nuevos directores que se están atreviendo a desafiar estilos y géneros estancados.
The Substance
Coralie Fargeat ya se postulaba como un gran talento en bruto desde su última cinta, Revenge, pero nadie esperaba este salto estratosférico con The Substance. A través del body horror logró romper el mainstream con una cinta llena de crítica hacia Hollywood en distintos ángulos, desde los productores funables hasta poderosos postulados de sobre la sobre-explotación de la belleza artificial. Con la ayuda del papelazo que se manda una olvidada Demi Moore junto a la nueva promesa Margaret Qualley, no le envidia nada a clásicos de los ochentas que utilizan el horror para calar profundo con su mensaje.
Nosferatu
Una oda al cine gótico, un canto a la vida y un canto al vampirismo. Robert Eggers rara vez decepciona. Nadie puede decir que no lo da todo en cada uno de los proyectos que embarca. Imposible que no lo visualicemos haciendo esta película, porque realmente era el indicado para hacerla. Ha cobrado vida el vampiro que da miedo, ese ser no-muerto que busca saciar su hambre por sangre; una mirada bastante distinta al vampiro que tenemos acostumbrado, a un seductor que de solo mirarte deseas ser parte de él. Aquí todo funciona y está pensado con precisión de reloj suizo, algo a lo que nos tiene acostumbrados el director, que perfectamente podría ser un historiador si no hubiese elegido el cine como carrera. Atmosférica y perturbadora, Nosferatu es un logro cinematográfico, en el que se ve toda la maestría de un cineasta que tiene aún mucho por mostrar.
Anora
Cuando hablamos de carreras con proyección, el nombre de Sean Baker se va posicionando cada vez más. Y no es de extrañarnos, dado que Anora, su último film se ha convertido en uno de los más exitosos del 2024. Una montaña rusa que no te suelta y que se mueve de forma muy cómoda y natural por géneros como el drama, la comedia e incluso la acción. La realidad de la vida nocturna y el trabajo sexual chocan con una clase social y sus extensos privilegios, algo a lo que la protagonista nunca estuvo expuesta. Nosotros queremos creer junto a Anora, la protagonista, que tenemos el sueño americano en nuestras manos, pero la caída es dura, y tarde o temprano las zapatillas de cristal se rompen. Solo queda aplaudir al director por la capacidad que tiene de mostrar la vulnerabilidad en su punto más crudo, más honesto y por las lágrimas derramadas.
Kind of Kindness
¿De cuántas formas podrá Yorgos Lanthimos ocupar a Emma Stone, Jesse Plemons y William Dafoe? La respuesta es, aparentemente, de tres majestuosas formas más. Un popurrí de emociones y géneros que conectan con sus raíces como director, abrazando lo extraño y original de sus propuestas de formas que no se habían visto desde antes de The Favourite. Cuando Yorgos experimenta es cuando más brilla y Kind of Kindness nos entrega un desplante prístino en todo aspecto, dejando en claro por qué es uno de los directores más importantes de nuestra generación.